Conoce a Campbell Flakemore, campeón mundial contrarreloj sub23
Por @pmpalermo
Cuando todo indicaba que el irlandés Ryan Mullen se quedaría con el título mundial contrarreloj sub23, apareció el gigante australiano Campbell Flakemore rodando a 49.5 km/h y le arrebató la gloria de entre los dedos por unas dolorosas y escasas 48 centésimas.
Nacido hace 22 años en Tasmania y producto del Avanti Cycling Team de su patria (equipo cantera de donde salieron Richie Porte o Steele Von Hoff, entre otros), este portento de la naturaleza es un rodador impresionante con una planta que intimida merced a sus 186 centímetros de altura y 73 kilogramos de peso que lo convierten en una bala cuando viaja acoplado.Apodado “The Velvet Hammer” por los terribles pero armoniosos martillazos que da en cada pedalada, viene de imponerse en el prólogo del Tour de´l Avenir por delante de Davide Martinelli o, más recientemente, fue 3° en la exigente Chrono Champenois donde cedió 39″ con la bestia Rasmus Quaade.
Flakemore es otro talento del continente aussie que, en los últimos años, tuvo como grandes animadores de las pruebas sub23 contra el crono a Damien Howson, Rohan Dennis, Luke Durdbridge o, algo más atrás en el tiempo, a su ídolo Richie Porte.
Amante del fútbol y de los deportes en general, el de Tasmania tiene una mentalidad ganadora que lo llevó a exprimirse al 110 % bajo el agua recordando durante todo el trazado su derrota de 2013 cuando también era el máximo favorito y ni siquiera subió al podio, hecho que lo mantuvo motivado durante toda la campaña, en la que no brilló tanto como la anterior.
Es que el año precedente lo tuvo un escalón más arriba si se quiere, con victorias en las cronos de dos de las vueltas por etapas más importantes del calendario sub23, Olympia´s Tour y Thüringen-Rundfarht, donde doblegó a los mejores especialistas, sin olvidar que hizo lo propio en la ya citada Chrono Champenois que sirve de antesala del Mundial.
Todavía con su futuro en el aire pero con anhelos de dar el salto al World Tour, el talentoso atleta reconoce que debe trabajar mucho en su resistencia y escalada en grandes puertos, aunque eso no le preocupa y cree que seguirá progresando en los años venideros.
Lo cierto es que el nuevo campeón mundial se quitó una espina de adentro y mostró que está listo para el siguiente paso, por lo que seguramente, tras tamaña exhibición, habrá noticias en torno a él en breve y lo veremos el curso próximo codeándose con los monstruos del World Tour a los que, por cierto, poco tiene que envidiar cuando de rodar sobre la cabra se trata.
Pablo Martín Palermo
