Conoce a… Mike Teunissen, ¿próximo aspirante a la París-Roubaix?

Por David Hunter

“Cuando comenzó la temporada, tenía la sensación de estar en una encrucijada. Ya no soy un niño y tenía la obligación de dar un paso al frente para poder obtener libertad de cara a las próximas campañas.”

A diferencia de otros protagonistas de esta sección, hoy le tocó el turno a un ciclista más maduro (26), próximo a ingresar al pico de su vida profesional. Mike Teunissen, pues de él se trata, empezó a desplegar sus alas en Sunweb, luego de un par de años en LottoNL-Jumbo. En el equipo de Dumoulin, empezó a confirmar lo que de él se esperaba…

“Afortunadamente, mi primavera fue muy buena y tuve resultados favorables en París-Niza, Dwars door Vlaanderen, Tour de Flandes y París-Roubaix.”

Ciertamente, fue en la Carrera al Sol donde empezó a asomar. Si recuerdan, la etapa inicial acabó con una cota adoquinada de 2 km bajo un clima horrendo. Y fue Arnaud Démare el vencedor, con Teunissen quinto.

“Es un sueño estar en estas competencias que miraba por TV hasta la categoría Sub23. Cuando pasé a profesionales entendí que el nivel que miraba a la distancia era incluso más alto y que ganar alguna vez sería casi imposible. Aún así, seguí trabajando y nunca creí que iba a poder ser competitivo en el World Tour, pero sucedió. La París-Niza me sirvió para entender que yo pertenecía a ese mundo.”

Y vaya si fue así. Esa semana, el de Sunweb se hizo con otros tres top 10, dirigiéndose con la moral por las nubes hacia las clásicas. Y todo siguió por un derrotero positivo, puesto que fue 2° Dwars Door Vlaanderen, 18° en el Tour de Flandes y 11° en Paris-Roubaix.

“Aprendí todavía más. Básicamente, la diferencia entre los Monumentos y el resto de las pruebas. En las grandes citas, todas las estrellas están presentes y se corre a otro ritmo y durante más tiempo. Tener en las piernas carreras de más de 200 kilómetros es clave, porque aprendes a dosificarte en todo sentido.

Casi logro el top 10 en Roubaix pero me sentí como si lo hubiera logrado. Mi próximo reto allí es mejorar ese número. En cambio, en Flandes hubo más desnivel y eso no me beneficia, pero me encanta la carrera y seguiré apuntando a las dos como objetivos en el futuro.”

Está claro que, habiendo sido campeón como Sub23, la Paris-Roubaix es especial para él.

“Amo la carrera en todo aspecto. Lo primero, los preparativos: controlar la presión de las cubiertas, las tácticas, reconocimientos, etc. Luego, ya en competencia, medirse en el llano previo a los adoquines sin perder de vista los movimientos de los rivales. Una vez en el pavé, todo es impresionante. Hay que aprender a colocarse antes de cada tramo o cuándo pasar al ataque. Ahora aprendí que, en 2018, salí antes de tiempo.”

Concluida la primavera, Mike se enfocó en la Vuelta a España. Viajó a afinar detalles en el Tour de Polonia, donde todo iba de maravillas (NdR: tres top 10 en los primeros tres días) hasta que una caída arruinó las cosas. Una fractura de clavícula lo mermó, pero no lo detuvo.

“Aún no había sanado, pero mientras no me volviera a caer, sabía que podía seguir la estela del pelotón. Lamentablemente, en la etapa 2 me volví a ir al suelo, pero pude seguir. Y esas tres semanas, que completé, me ayudaron a ser más fuerte. Por supuesto, nunca encontré mis piernas de la primavera, pero a medida que progresaba, empecé a ayudar a los líderes del equipo en el llano o en los sprints.”

Posteriormente, Teunissen mostró destellos en Turquía, última prueba como miembro de Sunweb. Es que, tras dos años en la  formación germana, el holandés optó por regresar a casa y firmó con el LottoNL.

“Es tal cual, un regreso a mi hogar. Yo crecí allí y nunca perdí el contacto con ellos. En Sunweb la pasé genial y me encantó lo organizados que son en todos los aspectos. Todos saben lo que tienen que hacer y por qué.

Fueron dos temporadas plenas, con muchas caídas pero, a la vez, con infinidad de carreras. Conocí el Tour el año pasado y aprendí muchísimo. Es la prueba máxima y bien merecido tiene el estatus. Luego, en 2018, pude estar en las clásicas y avancé en mi consistencia.”

Con 26 años, este atleta parece listo para dar otro salto. Posee el talento y algo de experiencia, factores ideales de cara a los principales eventos de un día en el calendario. Pero, ¿tiene margen de mejora?

“Por ejemplo, creo que mi sprint puede ser mejor. Además, anhelo trepar más para poder disputar finales en lo que no aguanten los embaladores.

Ser más veloz en cotas pequeñas es una deuda pendientes. No obstante ello, los años y la experiencia suman y lo apliqué entrenando menos kilómetros que la mayoría de los jóvenes, un error muy común que suele arruinar planificaciones. En definitiva, considero que mi mejor versión está por venir.”

Teunissen es un pedalista de alto nivel, aunque no ha encontrado su verdadera especialidad dentro del ciclismo. En LottoNL tendrá que hallar su hueco, probablemente, entre los clasicómanos del equipo. Si se concreta la llegada de Van Aert, la estructura tendrá a dos hombres top para las piedras. ¿Cuál es su deseo para 2019?

“Me conformo con ganar una carrera, no importa cuál. En 2018 hice casi todo un calendario World Tour y levantar los brazos allí es prácticamente imposible. Pero tras mi crecimiento, ahora considero que eso puede variar.”

No sería utópico ver a este pedalista ganando. Su sprint es respetable y tiene opciones en grupos reducidos. Ojalá LottoNL genere oportunidades para él, porque una diana, lo ayudaría notablemente a elevar aún más su nivel.

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