“El ciclismo colombiano nunca debió perder a Postobón”

Por @pmpalermo

Diez años le bastaron al equipo Postobón para quedar en la historia del ciclismo, no sólo el colombiano, sino el mundial gracias a sus extraordinarias prestaciones en las principales competencias del calendario como Tour de Francia, Vuelta a España y Giro de Italia.

Nacido en 1986, en pleno auge de los escarabajos en Europa, Postobón fue en sus inicios la contra cara del Café de Colombia hasta que la desaparición de éste último conjunto dio vía libre a los representados por la fábrica de bebidas, que impusieron su ley a nivel nacional las siguientes temporadas.

Postobón pasó a la posteridad porque sus integrantes brillaron una y otra vez en el ciclismo grande, con grandes logros obtenidos por Lucho Herrera y Álvaro Mejía principalmente, siempre ubicados en el top 10 de las grandes vueltas, consiguiendo etapas y clasificaciones de montaña y demostrando al mundo el poderío escalador de los colombianos.

Es imposible hablar de la escuadra cafetera sin mencionar el trágico incidente que los marcó para siempre cuando el 21 de febrero de 1995, tres de sus miembros (Néstor Mora, Augusto Triana y Hernán Patiño) perdieron la vida en un accidente vial durante un entrenamiento.

Hecha esta breve pero obligada reseña histórica y tras el reciente anuncio del regreso de la importante empresa al ciclismo 18 años más tarde para colaborar con los seleccionados nacionales, Ciclismo Internacional contactó a algunos de los que hicieron grande al equipo.

Muchos de ellos, ya alejados de este deporte, prefirieron no hablar, pero no fue ese el caso con Álvaro Mejía y Gerardo Moncada, quiénes incluso sueñan con participar y expandir el retorno de la compañía al deporte pedal en Colombia.

Moncada, recuerda con cariño sus años como integrante  del combinado que dirigía Mesa, donde pasó gran parte de su etapa como corredor: “yo corrí en Postobón del 86 al 94 y todo lo que fui y lo que soy lo hice con ellos“, añora. “Estoy muy agradecido con todos pero principalmente con Don Raúl“, completa.

 “Este regreso de Postobón es lo mejor que le puede pasar al ciclismo en este momento de tanta gloria”, sigue y redobla la apuesta: “Tienen que sacar otro equipo para los jóvenes, para que no se pierda tanto talento que tenemos“.

“Me gustaría, si saliera, estar vinculado y ser Director Deportivo, ya que creo poder aportar algo de lo aprendido“, sueña en voz alta Moncada, quién a los 51 años sigue rodando en bici y además se dedica a trabajar en su finca.

“Esta empresa le dio al ciclismo Colombiano el status y la importancia que debe tener y con su partida se quedó huérfano a nivel local hace muchos años, aunque ha mantenido presencia en el calendario internacional por la calidad de los deportistas y los equipos extranjeros“, dice Mejía.

“Ahora Postobón se ha vinculado de nuevo con el deporte de ciclismo para apoyar los programas de la federación y ese es un aporte valioso que debemos aplaudir, y esperamos todos los amantes del ciclismo que esta acción se vea reflejada significativamente“, reflexiona.

“Tengo los mejores recuerdos de esa hermosa experiencia cuando apenas llevaba poco tiempo como ciclista. Allí escribí junto con mis compañeros anécdotas, derrotas y triunfos maravillosos como los clásicos RCN ganados a los mejores profesionales, por lo que empecé a sentirme como en mi casa“, rememora el “Cometa de Santa Rosa del Cabal” al tiempo que saluda a sus mentores:” el apoyo por parte de todos mis compañeros y el cuerpo técnico siempre fue muy cálido y Raúl Mesa fue un gran maestro (aprovecho para enviarle un abrazo y una pronta recuperación)”, continúa.

“Personalmente siento una gran alegría saber que Postobón seguirá engrandeciendo este hermoso deporte, esto significa que nunca perdieron el amor por el ciclismo y que con esto surgirán nuevas oportunidades“, cuenta optimista y enseguida explica: “confío como siempre lo he hecho que tendremos nuevamente un gran equipo haciendo calendario nacional e internacional llevando en los corazones este gran nombre“.

Llegado a este punto es que Mejía, 4º en el Tour de Francia en 1993, confirma que “Hace varios años he querido tener un espacio con los responsables en Postobón para presentar y hablarles de la importancia que tendría en el ciclismo colombiano y para ellos mismos un nuevo programa de equipo“.

Con la entidad propia de su laureada trayectoria, nuestro protagonista contextualiza la influencia de la compañía de bebidas y hace un llamado de atención sobre las falencias del periodismo: “Postobón hizo un camino importante en el reconocimiento de nuestro ciclismo nacional e internacionalmente y dejó marcadas a algunas empresas que han seguido apoyando este deporte y al gobierno, que también entendió que era importante apoyar algunos programas competitivos de las bielas, pero sigue faltando compromiso y seriedad en los medios de comunicación“.

“El ciclismo todavía no está donde se merece porque no hemos terminado de entender la importancia del mismo.No encuentro respuesta a que se realice en Colombia un campeonato mundial de ciclismo en pista y no tenga cobertura masiva de los canales de televisión“, redondea el concepto el ex médico del Movistar Continental.

Lo concreto es que Postobón está de vuelta y, anécdotas al margen, es claro que el ciclismo colombiano y sudamericano en general recupera un símbolo de un pasado ilustre que podría reeditarse.