Julián Gaday, la confirmación de un talento

Por @pmpalermo

El ciclismo argentino crece a pasos agigantados y también sus ciclistas gracias a la creación de equipos profesionales como el San Luis Somos Todos y el Buenos Aires Provincia, pero también debido a la inversión del estado en conjunto con la federación de ciclismo local.

Es que lo directivos del ente que rige los destinos de este deporte en el país han logrado, mediante diversos acuerdos, llevar a las jóvenes promesas a competir en el calendario amateur de España, donde además cuentan con casa, transporte y demás comodidades que poco tienen que envidiar a un equipo profesional.

Dentro de este grupo de promisorios corredores se encuentra Julián Gaday, una de las joyas del Buenos Aires Provincia, quién ganó hace unas horas el Circuito Escalante, tal como hiciera hace unos días con el GP San Lorenzo.

Gaday, oriundo de Luis Guillón, en Buenos Aires, tiene 23 años y su explosión deportiva se demoró un poco debido a que su centrada personalidad y su entorno, lo guiaron hacia el estudio, por lo que hoy está recibido de Controlador Aéreo, además de contar con tres años de Ingeniería Mecánica en su haber.

Hijo del ex ciclista Olímpico, Alberto “el turco” Gaday, otrora su mentor y compañero de entrenamiento, Julián y su talentoso hermano Lucas, quién merece una nota aparte, estaban destinados a triunfar en el mundo del ciclismo.

Guiado por su padre y por un amigo de éste, Sebastián Donadío, hoy Manager del equipo naranja, el mayor de los Gaday creció paulatinamente como corredor, destacando en los duros y veloces criteriums y circuitos locales.

Increíblemente, “Juli”, llegó a vencer a los mejores pedalistas argentinos casi sin entrenar, ya que durante 2008 y 2009, sus obligaciones estudiantiles lo alejaron del asfalto y el único modo que encontró para mantenerse en forma fue dar clases de spinning y competir allí dónde hubiera una prueba de fin de semana.

Su camino deportivo se aclaró recién en 2012, cuando luego de recibirse, fichó por el nuevo proyecto Buenos Aires Provincia y de allí en más no paró de crecer, con destacadas actuaciones en el calendario local de ruta.

Quizás su mejor momento llegó en las etapas llanas del Tour de San Luis, dónde se mostró combativo como nunca y peleó la clasificación de los sprints hasta el último día para terminar en segundo lugar tras Leandro Messineo.

El fondo físico tras la competencia puntana fue notable y trasladó su pedaleo ágil, ese que adquirió de pequeño en las pistas bonaerenses, a la Doble Bragado para luchar en las escapadas y embalajes de la competencia más tradicional del país.

De allí en más, tras acontecimientos de pista como los Seis días de la Rosa, Gaday se vistió de celeste y blanco para defender los colores de la exitosa Selección Argentina que está arrasando el calendario español.

Dueño de un físico pequeño, propio de un escalador, Julián es un sprinter notable, más de cadencia que de potencia, tal como se pudo apreciar en Huesca, San Lorenzo y Escalante, donde ganó, o en Villablino, cuando concluyó segundo tras su hermano.

Vale la pena destacar que es su primera experiencia en el país ibérico, ya que llegó a inicios de agosto y desde entonces que no para de asombrar, a punto tal, que ya hay algún equipo extranjero que posó sus ojos en el talentoso atleta.

Para quiénes no conocen a Gaday, tanto él como Lucas, son excelentes compañeros, siempre dispuestos a trabajar en pos de los intereses del más fuerte y sin atisbos de egoísmo en su personalidad, hecho que ayudó sin dudas a este merecido presente.

El ciclismo argentino atraviesa su mejor momento y es cuestión de tiempo para que sus pedalistas encuentren acomodo en estructuras de mayor envergadura, pero lo cierto es que Julián Gaday ya está listo para dar el salto y sólo falta que le den la oportunidad.

Pablo Martín Palermo