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Los vueltómanos más conservadores del pelotón internacional

Por Oscar Trujillo Marín

Luego de haber hecho en una nota anterior el recuento de los corredores más ofensivos, los que más se muestran al ataque del pelotón en el apartado de vueltómanos, hoy vamos con la otra cara de la moneda: los más conservadores. Los que poco le ponen la cara al viento para cerrar huecos o tirar del grupo de elegidos, los que rara vez intentan un ataque, sobre todo en subida y de lejos, partiendo del lote de favoritos.

No siempre lo hacen por racanería o mezquindad, algunos están allí por encima de sus posibilidades. No todos estamos llamados a ser genios y súper clases en la vida. Algunos reservan cada gramo de energía y no dan un vatio de más porque aprendieron a subir por necesidad, sin tener las condiciones naturales para ello. Con mucho esfuerzo -a ritmo- se mantienen con los mejores, lo cual también tiene mucho mérito.

Es evidente que en una gran vuelta se puede atacar en cualquier terreno, (sobre todo si no vas por la general) pero si eres favorito te marcan mucho más. Sin embargo, los huecos y grandes diferencias se obtienen sobre todo -de forma muy mayoritaria- desde hace muchos años en las cronos y la alta montaña, en esfuerzos individuales cuando queda ya muy poca gente en el lote. Y, eventualmente, en los abanicos, pero esto ya es una labor de equipo y no es responsabilidad exclusiva del corredor, que solo, por mucho que quiera no puede formarlo. Lo que sí puedes hacer en situaciones de extrema igualdad y tienes buena punta de velocidad, es ir limando segundos en las llegadas y con bonificaciones, eso también es ambición y agresividad.

Cabe anotar que hay corredores completos, extraordinarios, que suben muy bien y se saben tan excelentes contra el cronómetro que se pueden permitir trepar a ritmo a rueda de los mejores escaladores para destrozarlos contra el reloj. Eso les basta para ganar grandes vueltas. En esto, los grandes campeones de la historia, pero sobre todo Anquetil e Induraín, basaban sus enormes diferencias a su favor, que luego solo tenían que cuidar marcando a sus rivales sin necesidad de alardes y derroche de fuerza y riesgos innecesarios. Puede que sea más aburrido para el espectador, pero es muy eficaz.

Los que odian a Quintana de manera vocacional y entusiasta podrán decir que debería estar aquí por sus casi tres temporadas flojas, aunque sería injusto por las que sí fue osado, y por  la docena larga de vueltas de una semana que ha ganado atacando de lejos en la etapa reina de montaña, que suele ganar con gran hueco sobre los demás favoritos. Pero más aún, porque incluso estando muy corto de forma como en los últimos casi tres años, lo intenta a pesar de que las fuerzas no comparezcan para abrir diferencia tantas veces, por lo menos salva el top 10 y se suele llevar una dura fracción de montaña en grandes vueltas, cosa que Kruijswijk, kelderman o Buchmann, por ejemplo, de momento no hacen. De eso se trata la nota, de resaltar los más conservadores casi siempre.

Los que odian a Dumoulin (porque a lo mejor no nació en su país o no corre bajo su bandera) dirán que siempre hace la goma en montaña y debe sus triunfos y buenos resultados a su excepcional crono, pero sería injusto también. Su Giro de Italia lo ganó atacando a los escaladores en su propio terreno y luego recuperándose ante ellos de la adversidad de forma agresiva y admirable. En la Vuelta a España de 2015 atacó en varias etapas de montaña, aunque solo sirviera para meter poco tiempo a los favoritos y ganó etapa en cuesta también, fue ofensivo hasta que se fundió el penúltimo día. En el Tour de Francia 2018, también lo intentó, incluso de lejos aunque no dio frutos. Por eso no está aquí. Pueden votar quien -a juicio de ustedes- es el especialista en grandes vueltas más conservador, el que menos ataca en pruebas por etapas, el más ruedero y abonado al puestómetro.

Bauke Mollema: A sus 33 años sigue siendo un vueltómano esforzado. Un sufridor profesional que suele aguantar la montaña a punta de coraje y oficio, ya que rara vez le sobran fuerzas como en el Mont Ventoux de 2016. Esa es una de la excepciones, lo normal es verlo haciendo la goma o descolgado al final de las etapas tras los favoritos, pero se mantiene dignamente sin desfondarse del todo. Ha sabido maquillar con éxito sus carencias dotándolas de un gran fondo todoterreno, aguante, constancia y versatilidad, cosechando triunfos de prestigio como una clásica San Sebastián, un Giro de Lombardía y un puñado de buenas etapas. Sin embargo, hablamos hoy de su faceta como corredor de tres semanas, donde no suele mostrarse muy ofensivo que digamos, más bien aguanta como puede a cola del pelotón de los elegidos siendo uno de los abonados al puestómetro.

No es su culpa suya, lo hace lo mejor que puede, siendo loable su esfuerzo. Es un muy buen corredor, sus prestaciones en montaña y crono son decentes, pero no le alcanzan para más. Con lo que tiene ha hecho demasiado. Bauke ha logrado quedar 5 veces en el top 10 de grandes vueltas, una de ellas tercero, ya hace 9 años en la Vuelta a España 2011. Su fuerte es sufrir sobre la bicicleta en todos los terrenos de manera bastante fotogénica y conmovedora.

Bauke Mollema (Photo by Tim de Waele/Getty Images)

Steven Kruijswijk: Le dedicamos un artículo el domingo pasado por su cumpleaños 33. Steven es un gran corredor: educado, correcto, disciplinado, luchador, regular; puede ser el yerno ideal, el amigo incondicional, el trabajador que no da problemas. Puede ser eso y mucho más, nada malo en ello. Pero para apostarle dinero a una victoria suya en una etapa o la general de una carrera importante no es, en absoluto el hombre adecuado. ¡Le cuesta horrores ganar! y es esa muy probable la única explicación de su carácter conservador (salvo muy pocas excepciones en sus 13 temporadas como profesional 10 de ellas dentro del World Tour) es, como lo explicamos en su pasada nota, que es bueno para muchas cosas pero el mejor en ninguna.

Steven no tiene cambio de ritmo sostenido y demoledor para irse de los favoritos en alta montaña, salvo en el Giro de 2016. No tiene rush ni punta de velocidad. No es, ni mucho menos un Savoldelli bajando y sus cronos -sin ser malas- no igualan a las de los especialistas. Steven no es conservador por que quiera, es porque no puede ser otra cosa y ese estilo estoico, casi dramático es lo único que le permite quedar en el top 10 que es su tope. Su podio el año pasado, especulando, ha sido su cénit.

Foto: Team Jumbo-Visma

Emanuel Buchmann: El alemán de 27 años revelación en la pasada ronda gala, en 6 participaciones en grandes vueltas con las que ya cuenta, apenas podemos destacar su lugar 15 en el Tour de 2017, su puesto 12 en la Vuelta a España y su sorprendente cuarta casilla del año pasado. Muy meritorio, pero sin ponerle la cara al viento más de 10 km durante los 21 días, y esto exagerando. No le conocemos a Emanuel ningún ataque reseñable que le haya dado réditos en forma de etapa en una grande ante los mejores y menos el año pasado en su confirmación, donde cuidó con mimo sus fuerzas sin dar una pedalada de más para quedar en el sitio –destacado- que terminó. Pero el podio, aunque cerca en tiempo, nunca fue asaltado por el germano. Su progresión es buena y parece tener condiciones de corredor completo, pero la audacia y el carácter ofensivo no se le conoce aún.

Wilco Kelderman: (29 años) Parece que ser vueltómano y nacer en los Países Bajos predispone de forma inquietante para sufrir en la alta montaña y de paso para ser un corredor conservador en la misma. Si tu intención es ser especialista en grandes vueltas, es evidente que hay que hacer curso de alturas y aprender a subir muy bien, (y por tanto bajar igual) hacerlo entre los mejores como mínimo. Pero “Países Bajos” no parece un nombre puesto por capricho. Los holandeses nacen y crecen en una nación que en buena parte está muchas veces por debajo del nivel del mar y su máxima y mareante altura de vértigo es el Monte Vaals (en Vaalserberg) que alcanza unos siderales 323 msnm. Poco que añadir.

El corredor neerlandés promedio, que rueda genial en llano, con piedras y mucho viento, -salvo raras excepciones- aprende a subir ya grande, siendo ciclista profesional, cuando sale de su país. Con mucho esfuerzo lo trabajan y logran mantenerse con los mejores; pero salvo Zootemelk (al principio de su carrera Gesink) y otro puñadito de vueltómanos, en toda su historia (Rooks, Theunisse…) no están para hacer alardes en montaña.

Eso explica por qué atacan tan poco en cuesta y bajando. Wilco ha sido tres veces top 10 en la vuelta a España y una en el Giro. Abonado al puestómetro. Ustedes dirán ¿Por qué no ataca en el llano? Rara vez o casi nunca (salvo abanicos que se forman en equipo) a un corredor destacado en la general lo dejan colar en una fuga o ataque en llano. Si no sube excelente, tampoco baja con los mejores, no puede soltarlos en llano… y no es el mejor en crono ¿dónde diablos los va a atacar? Antes, hace mucho quedando entre los diez primeros.

Foto: Team Sunweb

Rafal Majka: El polaco de 30 años cuando ha perdido el hilo de la general, nos ha regalado unas exhibiciones y derroche ofensivo metiéndose en escapadas de gran nivel en procura de cazar etapas valiosas con éxito: 3 en el Tour de Francia y una en la Vuelta a España. Pero cuando no se ha desfondado y dejado todas sus opciones de general y se mantiene aún en la lucha por el top 10, se le olvida su alegría en la escalada y es otro constante abonado al puestómetro.

No hay brisa que le despeine en medio del grupo de los elegidos. Así, a rueda, ha cosechado 4 top 10 en el Giro de Italia, y uno en la Vuelta a España. De momento el Tour se le resiste para la general, nunca ha quedado en el top 10, aunque de forma irónica es donde se ha mostrado más contundente en la montaña. Eso sí, desde las fugas y fuera del ramillete de favoritos, lejos en tiempo ya. A lo mejor a veces, si no estás diez puntos para la general compensa más ser agresivo intentar dar espectáculo mostrando el patrocinador en las fugas y agrandar el palmarés con etapas.

Foto: Franco Xavier Videla

Rigoberto Urán: A sus 33 años, el colombiano es sin duda el vueltómano conservador con mejor figuración. Pocos corredores en activo pueden exhibir un 2° lugar en el Tour de Francia, y dos en el Giro de Italia sin apenas atacar. Rigo sube muy bien pero no es un escalador eximio como Bernal o Quintana. Se defiende en la crono, y aunque alguna vez haya ganado alguna contrarreloj larga, no está al nivel de los especialistas. En pruebas de un día tiene un olfato y clase increíble para meterse en los cortes buenos y es mucho más osado y audaz. Pero hablamos de su faceta de vueltómano hoy, donde no se prodiga mucho a la ofensiva. Aunque realmente él no tiene la culpa.

Debió haber sido comediante, relaciones públicas, vendedor de crece pelo, culebrero profesional, showman, administrador y animador de un local de vodevil, cosas para las que le sale un talento silvestre, espontáneo natural. Llegó al ciclismo siendo adolescente por necesidad, no por vocación: por fuerza mayor, por supervivencia, por aportar dinero a su casa tras el asesinato de su padre. No por convicción ni un deslumbrante talento de niño. Que luego se encariñó con la bicicleta y es un súper profesional, eso es otra cosa. Rigoberto Urán es el mejor ciclista del mundo sin condiciones naturales para serlo. Todo lo que ha conseguido ha sido a punta de apretar los dientes, de sobre esfuerzo, de coraje, pundonor, de una entrega y profesionalismo extremos.

Él no se hizo ciclista soñando en ganar el Tour de Francia como recitan todos los jóvenes corredores, él lo hizo por ganar dinero con carácter urgente para llevar comida a su casa y ejercer como el hombrecito responsable ante su hermana aún niña y su madre. Lo logró con creces. De ahí para adelante todo es ganancia. Hay que ser el mejor ruedero del mundo para ser dos veces segundo en el Giro y otra en el Tour, cuando no eres el mejor ciclista como Dios manda y tienes alma y talento más para comediante que se forjó a sí mismo para huir de la tragedia. Sí, Rigo ataca poco en grandes vueltas, seguro… pero para ser tan limitado es demasiado bueno, porque escoltar a Nibali, Froome y Quintana en el mejor momento de forma de sus respectivas carreras, está al alcance de pocos. Incluso de los más ofensivos del pelotón. Que le quiten lo bailado.

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Oscar Trujillo Marín

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40 pensamientos sobre “Los vueltómanos más conservadores del pelotón internacional

  1. Yo creo que el campeón de esta categoría es Rafael Maka, me impaciente verlo siempre a rueda

  2. Conmovedor artículo, no todos son cracks, debieron ser gregario y aún así son capos, admirable, falto un africano del lampre y del UAE que incluso disputó con un Yates la blanca del tour 2016 o 2017, Nunca le vi el rostro.

    1. Una característica de este tipo de corredores es que casi nunca ganan etapas y menos carreras con este estilo, son siempre 2, 3, 4 o 5s, pero si no tiene con que, antes hacen una buena carrera, con todo yo aprecio mucho lo hecho por Rigo

  3. Muy divertida la nota… de acuerdo en todo, solo que viendo al flamante campeón de Lombardía se me antoja que es tal vez el más mezquino o tacaño en cuanto a los vueltomanos…
    Con mi grupo de estudio hemos elaborado,desde hace rato ya una lista de tacaños o mezquinos a la hora de colaborar… te dejo esa idea, saludos.

  4. Creo que meter aquí a Kruijswijk no es demasiado justo. Es verdad que ha sido a veces ruedero pero tanto en Giro, Vuelta o Tour no ha sido raro verle atacar y la mayor parte de las veces, sin mirar hacia atrás. Otra cosa es su eficacia, pero vamos que es un tío que suele derrochar esfuerzo. No es un chuparruedas al uso, sí ocasionalmente. El Tour del año pasado puede dar esa impresión pero hay que entender que estaba (tras muchos sinsabores) a punto de obtener el podio en la más grande, algo que por mala suerte se le había escapado hasta entonces.

    1. ¿No se estará confundiendo de corredor? Excepto por el Giro 2016 que casi gana y lució en una forma nunca antes vista, el neerlandés no atacó nunca, y mucho menos “sin mirar atrás”. Ojo, que no se maltinterprete: en el caso de corredores diésel y croners, no es algo malo. Sólo se critica a los que son escaladores puros, tienen con qué y deben atacar porque pierden en las cronos…y no atacan. Pero no es este el caso.

      1. Toiur de Francia 2018 etapa con final en Alpe d’Huez. Pocos ciclistas han hecho lo que Kruijswijk hizo ese día.

        1. No coincido querido amigo, y han simo muchos los que lo probaron (así, rápido y sin buscar, recuerdo a Contador, Landa, Nairo, Froome, López..gente peleando una general que atacó, con o sin resultados). Llegó a ser líder virtual, pero se sabía condenado durante todo el parcial.
          Y además, una excepción no hace a la regla. LOs que mencioné antes siempre hacen algo, Kruisjwijk suele ir a rueda. Y no tiene nada de malo, como ya aclaramos en otros comentarios.

          1. No estamos comparando a kruijswijk con Landa, Contador, Nairo, Froome o López, lo comparamos con ciclistas conservadores. En cuanto a que un caso particular no influye… Muchos de estos vueltomanos tiene 3 o 4 ocasiones en su vida para hacer una buena general (no te digo para ganarla), gastar una de esas balas tirándote tu solo contra todo el Sky, sin apoyo de tu equipo y si que otro ciclista te quiera acompañar y aun asi (cuando muchos de los que nombras tu pararían para probarlo unos kilómetros más tardes a ver si hay alguien con el que pueden apoyarse, como seria lógico incluso para cualquier corredor agresivo) seguir, subir dando tal recital, combatir en el llano entre puertos con rodadores como Castroviejo y Kwiatkowski y aun asi quedarte cerca. De verdad que te recomiendo revivir esa etapa.

          2. Por debatir se puede debatir de cualquier cosa. Son trece años como profesional de Steven, de los cuales al margen del Giro de 2016 y ese agresivo y aislado día que ud recuerda en TF, que efectivamente se la jugó a todo o nada, desde luego, la inquietud en el grupo, los continuos ataques y constante agresividad no es su principal virtud. Pero es un balance pírrico de osadía y audacia para 17 grandes vueltas donde el holandés siempre (o ha sido jefe de filas solo, o compartido galones con otro pero actuando con total libertad) Comparado con los de ayer: Simon Yates, Nibali, Landa, López etc, bueno.., es obvio que Steven no ha sido propiamente un derroche de agresividad ni un alarde de beligerancia. Si nos ponemos tendenciosos y por dos o tres actuaciones osadas lo ponemos a la misma altura de los siempre inconformes y activos, así cabe Mollema y cualquiera; sería imposible darle más méritos a unos que a otros, por mucho que algunos como Yates o Nibali o Froome, o el mismo Quintana no lo hayan intentado no dos ni tres veces sino hasta 15 0 20 veces en vueltas distintas muchas de ellas llevándose un buen botín. No es el mismo nivel de ofensividad, y por supuesto que por numero de ataques con éxito y sin él acumulados todos los de ayer y algunos de hoy superan a Kruisjwijk. No es demeritarlo, no es ningunearlo, ahí están las estadísticas y las imágenes en trece años que no mienten.

          3. Entonces, por esa etapa, deja de ser un ciclista conservador…
            Insisto, la excepción no hace a la regla. Fíjate lo conservador que será, que aún recuerdas su ataque…porque fue el único.

          4. Pues sinceramente has visto poquito del Giro del 2015 por ejemplo, solo lo que hizo en ese Giro junto con Hesjedal le vale para no tener que aparecer jamás en las listas de vueltómanos conservadores pues no hizo que otra cosa que tirar, atacar o fugarse, ya fuese para buscar una victoria, remontar en la general , la montaña o por el puro placer de verse fuerte si hasta se reventó a si mismo en Finestre y otros puertos por pasarse de su límite atacando. Eso más alpe d huez 2018 de salida y en solitario casi todo el rato ya hace que esté en una categoría muy distinta a los Mollema, Buchmann, Uran y cía, pero es que como ya dije en otro artículo es algo habitual verle probar algo ya sean ataques desde la base de los puertos o fugas de salida cuando no está a tope para remontar en la general (Angliru 2017, la etapa de Sierra nevada 2017, Naturlandia 2018, Bormio 2017, e incluso en los giros de su debut en 2010 y 2011). Soy el primero que le decepcionó su Tour el año pasado pero te aseguro que la percepción generalizada sobre él en foros y webs de ciclismo de todo índole y nacionalidad está más próxima a la del otro usuario y a la mía que a la que a la de esta web, es más antes de su Tour del año pasado directamente es que muchos lo verían en el grupo del otro artículo (el de los ofensivos) ahora quizás en un término medio, ni en este ni en el otro

          5. Buenas tardes! Con todo respeto, que sólo dos personas en medio de un mundo opinen eso no va a generar que yo -al menos- cambie mi percepción. Por el contrario, si sólo dos personas entre cientos de miles que entran cada día aquí dicen eso…
            Y sí que lo ví, en 2015 (lo ví venir de hecho: https://bicis.frangandara.net/los-10-corredores-a-seguir-en-el-giro-de-italia-2015/ ) y antes también. Encontrará artículos más antiguos sobre él aquí mismo!
            Igual suelo coicidir con ud. Gracias por sus aportes, que enriquecen este foro!

          6. Gracias por los enlaces y perdona si ha sonado como un ataque mi opinión, tampoco me sorprenden pues suelo coinicidir bastante con las opiniones y previas de esta web , especialmente con las de ud, no pasa nada por diferenciarnos en una opinión. Un saludo y gracias por tu respuesta :)

    2. pienso de la misma manera otros ciclistas del articulo si estan por merito propio aqui.

  5. Majka es un clásico de las fugas y en varias carreras en las que estaba top 10 ha atacado. Kruijswijk es muy ofensivo, incluso más que alguno de la lista de los más agresivos. Pero el Tour pasado esta en la mente de todos. Lo cual es justo e injusto, solo en parte. Lo de Mollema aquí es una broma. Cuando estuvo delante en una grande (Tour 2016) fue el más ofensivo y quien salio delante atacando en esa etapa de Mount Ventoux. Además es un clásico de las fugas y y se llevo la Lombardia por pura valentía.

    PD: propongo la idea de que el siguiente debate sea sobre los mejores lanzadores que eso si que da para discusión por la segunda plaza (la primera es evidente)

  6. El “ruedero” de Urán es el primero de esa lista. Aunque nunca hecha codo, parece una rémora todo el tiempo. Así se quede del pelotón siempre va detrás de otro. La única etapa en la que lo ví tirando fue cuando Chavez perdió el Giro frente a Nibali.

  7. Urán, creo que es el más conservador y además el conservador con mejor palmarés

  8. Creo que si ha habido corredor conservador toda la vida ese ha sido Alejandro Valverde, no digo que sea malo porque soy un fan del Bala pero tal vez por su magnífica punta de velocidad ese estilo le ha permitido ganar muchas carreras

    1. Un corredor que a punta de bonificaciones en linea de meta e intermedias haya podido ganar tantas vueltas por etapas no puede considerarse conservador y menos conformista. Precisamente romper el grupo con tu principal virtud, sacar una luz de 10 segundos en los últimos 500 metros y obtener 10 segundos más marca la diferencia por agresividad. Otra cosa es que el siempre se haya sabido limitado en alta montaña y suba a ritmo regulándose con dificultad, pero como no lo logren despegar antes del último km les gana y eso tiene mucho de audacia y mérito, no obtiene 130 victorias alguien conservador, reservón o pasivo. Incluso en alta montaña y en bajada muchas veces lo ha intentado de lejos también con suerte dispar pero lo ha intentado.

      1. Yo solo utilice la palabra conservador al referirme a Don Alejandro Valverde, en ningún momento utilice abjetivos como conformista que claramente nunca lo fue y ahí está su palmarés para demostrarlo. Al inicio del artículo leí este enunciado “los que rara vez intentan un ataque, sobre todo en subida Y DE LEJOS, partiendo del lote de favoritos”

        El Bala es el mejor representante de los mal llamados valleros, pero estos llegan a esas instancias a punta de aguantar y aguantar para no ser descolgados por los eximios escaladores, ya una vez están ahí salen y dan la cara, pero hablamos siempre de los últimos 500 mt, a ellos no se les puede tildar de corredores ofensivos.

        Por último quiero dejar claro que para mí Alejandro Valverde es el ciclista por mucho más admirable del actual pelotón internacional.

        1. Estoy de acuerdo con su apreciación, aunque no sé si llamarle conservador sea lo más adecuado. A mí me parece que es más una cuestión de astucia. Sufre hasta el final y luego los remata. No tiene las herramientas para ser ofensivo en la escalada y reserva su ataque para servirse de sus cualidades. Pero lanza el ataque. Y eso es lo que se extraña en los corredores conservadores: que le pongan picante a la carrera. Obviamente, están limitados por lo que menciona Trujillo en la nota.

  9. Otro que se viene a la mente es Zakarin, aunque el ruso lanza sus ataques ocasionales, muchas veces suele seguir ruedas.

    1. A Zacarin, no lo calificaría de Conservador, mas bien un aguerrido sin frenos, debería medir mas sus fuerzas y su calendario, para aspirar a un segundo podio

  10. No he analizado mucho a Enric Mas, sin embargo en la VE2018 dejó sensaciones de mantenerse a rueda sin dar una pedalada para colaborar con otros; en el TDF2019 tampoco es que haya aportado mayor cosa a Julian y sin embargo en Guanxi mostró que tenía aliento y sabe mantenerse a la buena rueda sin una pedalada en acción conjunta. El hecho es que parece astuto, va como una remora todo el camino para solo gastar en el remate. Tal forma de correr le da algunos resultados pero no es precisamente atractiva.

  11. Si tan solo este artículo fuera de hace 10 años no dudaría en señalar a Evans como el más ruedero, con los candidatos de ahora incluso me atrevo a decir que Porte un poco (no miren Willunga Hill) y Rigo.

  12. Excelente nota y muy real. Otra cosa, podrían hacer una nota de los ciclistas jóvenes que subieron este año que vimos poco por la pandemia. Hayter Ardila por nombrar algunos. Y los ciclistas que prometían mucho y quedaron en el intento el español Fernández por ejemplo

    1. El Caso de Pozzovivo, creo es mas de limite de capacidad que de mentalidad conservadora, pues lo intenta, se esfuerza, resiste y hasta se descuelga, pero creo a ganado una etapa o mas pero no en una grande,

  13. Totalmente de acuerdo, yo metería a Louis M y posiblemente de los de antes tal vez a Evans aunque lo admiro y le hice tanta fuerza para que ganará su tour se me asimila mucho a Rigo, no era un croner, tampoco escalador, y se defendía super en el plano, pero nunca atacaba en la montaña, iba a rueda 10 mil veces y es cierto cuando lo descolgaban el. Era el que le ponía el pecho al viento.creo que era conservador por que le tocaba, au que ganaba etapas era en ambalaje reducido. Que tal un Kreuziger, o un Matias Frank. Se que no están en la lista por que o esta retirado o su época ya pasó, pero si estuvieran activos estarían en la lista.

    Excelente articulo

      1. Y Tejay Van Garderen, por poquitos números se salvo de estar en esta lista, sobre todo en sus últimos 5 años

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