Majka estrenará galones en el Tour de San Luis

El pasado 12 de septiembre, el polaco Rafal Majka celebró su vigésimo sexto cumpleaños por todo lo alto. Ese día se disputaba la penúltima etapa de la Vuelta a España, entre San Lorenzo de El Escorial y Cercedilla, y al término de los 175,8 km de carrera, con los puertos de Navacerrada, Morcuera –dos veces- y Cotos, el corredor del Tinkoff-Saxo Bank conseguía auparse al podio de la ronda española tras una de las jornadas más bonitas y emocionantes que se recuerdan y en la que acabó derrotado el hasta entonces líder, el holandés Tom Dumoulin.

Al día siguiente, Majka compartió en Madrid el podio final de la Vuelta a España con Fabio Aru, el ganador, y Joaquín ‘Purito’ Rodríguez. Era su primer podio en una grande tras el sexto puesto final en el Giro de Italia 2014 y tras sus tres victorias de etapa en el Tour de Francia, en Risoul y Saint-Lary-Soulan en 2014, cuando también ganó la montaña de la ronda gala, y en Cauterets en este 2015.

El podio en la Vuelta a España era una prueba más, quizás la definitiva, de que ya está preparado para asumir la responsabilidad y llevar los galones de un gran equipo como es el Tinkoff. “Aspiro a ser mejor cada día”, explica Rafal con naturalidad. “Es lo que me motiva. Mi sueño es ganar una gran vuelta por etapas y el paso natural en mi desarrollo deportivo pasa por ahí. Estoy contento de cómo va mi carrera”.

Junto a Peter Sagan, el flamante campeón del Mundo y gran estrella del momento, Rafal Majka liderará el equipo Tinkoff y estrenará sus nuevos galones en el Tour de San Luis. “Va a ser mi primera participación, pero mis colegas me han explicado que es una carrera dura y con calor, lo que me gusta mucho. Creo que va a ser un gran lugar para comenzar la temporada”, responde ilusionado por descubrir otros horizontes.

Atrás, casi olvidada en el tiempo, queda la anécdota que le permitió convencer a Bjarne Riis, el antiguo patrón del equipo, para que le fichase y le diese la oportunidad en el profesionalismo. Sucedió en enero de 2011, cuando sin haber cumplido los 21 años fue el único que aguantó la rueda de Alberto Contador en la concentración de pretemporada que el equipo realizaba en Mallorca.

Desde entonces, en ocasiones ayudando al madrileño a ganar y otras permaneciendo inteligentemente bajo su sombra, Majka ha ido creciendo, hasta convertirse en un grande. “Estoy muy feliz de formar parte del equipo Tinkoff”, explica. “Para mí es el mejor del mundo y tanto con Alberto como con Peter mantengo muy buenas relaciones. También con los demás corredores y con los directores, entrenadores y propietario”, añade sin olvidarse del gran patrón Oleg Tinkov y antes de zanjar cualquier atisbo de polémica con los líderes del equipo. “No hay conflicto de intereses”.

En paralelo a los objetivos que le marque el equipo y siendo consciente de que quizás, aún no se sabe, tenga que ayudar a Contador en el que podría ser el Tour de la despedida del madrileño, Majka afina la puntería y fija su mira para 2016. “Mi gran objetivo serán los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro”, explica.

Y debido a eso, y en un acto de sinceridad por su parte, se descarta para luchar por el triunfo absoluto en el Tour de San Luis: “Sería muy bonito, pero mi pico de forma está previsto para la segunda parte del año”, comenta. “Pero si no puedo ser yo, ayudaré a mis compañeros del Tinkoff a luchar por las victorias de etapa”.

Su dorsal, en cualquier caso, será uno de los más buscados por la calurosa afición de San Luis, que es consciente de que se trata de uno de los corredores con más presente y con más futuro del pelotón mundial y, probablemente, el relevo natural de su compañero Alberto Contador, quien muy probablemente diga adiós al ciclismo profesional la próxima temporada.

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