Póker de ases en San Luis Somos Todos

Por @pmpalermo

Como su nombre lo indica, el Tour de San Luis se desarrolla en la hermosa provincia cuyana, que tiene además el privilegio de contar con su propio equipo Continental, el San Luis Somos Todos, que enfoca toda su temporada pura y exclusivamente en enero.

Está claro que se trata de una apuesta arriesgada, pero hasta ahora y desde su creación, los dirigidos por Ramón Sánchez nunca salieron del cajón, al que subieron con Dani Díaz en dos oportunidades (2° en 2012 y campeón en 2013) y Sergio Godoy (3°) en 2014.

Con eso como referencia, no es novedad que vuelven a ser uno de los conjuntos más fuertes puesto que llegan en plenitud de facultades y, mejor aún, cuentan con más de una carta para optar a la general, lo que les permitirá sobrellevar situaciones adversas como la de Díaz el año anterior o manejar estrategias para poner en aprietos a los rivales.

El primero bajo la lupa, por derecho propio, es Sergio Godoy, podio en 2014 y en gran forma, tal como evidenció en diciembre cuando arrasó la Doble San Francisco Miramar o se mostró muy activo en citas del exigente calendario sanjuanino. En ese sentido, un dato no menor es que a un mes del inicio, contaba con un kilo más respecto al año previo, síntoma de madurez e inteligencia para poder afinarse casi en carrera.

Godoy fue el mejor detrás de Quintana en el 8° Tour, y así lo prueban sus dos segundos puestos en Cerro El Amago y Merlo, aunque no acabó 2° debido a la enorme renta obtenida por Gaimon en una fuga intrascendente el inicio de la competencia.

Si el mendocino, 5° en la Vuelta a Lavalle desarrollada en sus pagos,  llega en la misma forma volverá a estar adelante, porque además aprendió a ganar el Tour y se hizo acreedor de la capitanía, que seguramente será respetada en un equipo solidario como el puntano.

La nota negativa es la molestia que padece en una de sus rodillas producto de una caída en la Doble San Francisco Miramar, que lo llevó posteriormente al abandono en el Giro del Sol sanjuanino hace unas semanas. El golpe agravó el anterior y le provoca contracturas en los cuádriceps y piramidal. Habrá que estar atentos a su evolución.

Josué Moyano es, sin dudas, el siguiente en el listado. Nacido en San Luis, concluyó 5° en 2014 y 3° en 2011, cuenta con experiencia internacional a mayor nivel que Godoy (dos años en Caja Rural) y construyó su forma cuidadosa y efectivamente, sin gastar de más.

Está muy fino y entregó gratas prestaciones y resultados en las cronos que disputó en diciembre, requisito indispensable para no perder el Tour.  Moyano es un corredor muy regular cuando está en su período de gracia y, aunque no se mostró mucho, clasificó 3° en la Vuelta a la Bebida (2° contra el tiempo) y se quedó con La Etapa Argentina del Tour, complicada cicloturista que le valió un pasaje al mismo evento a desarrollarse en Francia.

Josué es muy centrado y profesional, conoce el trazado del Tour a la perfección y se toma la situación con calma en lo que quizás sea su mejor atributo.

Leandro Messineo fue el más discreto en 2014, en parte por la lesión sufrida en el Tour, que le dejó secuelas hasta bien entrada la campaña, cuando le descubrieron una fractura del Acetábulo de la cadera en la previa de los Juegos Odesur.

Sin embargo, aún sin grandes exhibiciones previas, el de Olavarría seguramente esté a la altura de las circunstancias. En enero pasado era señalado por lo bajo como el hombre más en forma de la escuadra, pero todo se fue al tacho en la etapa inicial, cuando sufrió la citada caída en el cierre de la llegada a Villa Mercedes.

Sin dicho percance, Messineo hubiera corrido igual suerte que Gaimon (fue 2° en la general) gracias a la enorme renta con la que el corte entró en dicha fracción. Eximio contrarrelojista, si logra reencontrar su mejor cara, tendrá mucho que decir en la 9° edición de la carrera sanluiseña, al menos en lo que a victorias parciales refiere, tal como hiciera en la etapa de Merlo en 2011.

A poco del comienzo de las acciones, su entorno lo ve muy fino, él está con la confianza que lo caracteriza y encima escalando mejor que nunca; tal vez no cuente para la general pero será uno de los créditos locales para dinamitar la competencia.

Jorge Giacinti tiene 40 años, ganó el Tour 2007, siempre clasificó en el top 10 en las cronos del evento puntano y apunta a repetir para defender su “reinado estadístico”. Y no le faltan motivos, ya que sin ir más lejos, subió al podio de la tradicional Vuelta al Valle de Río Negro por tercer año consecutivo y fue 4° en la Vuelta a Lavalle.

Además, el Gringo fue podio en el GP Raúl Alberto Colombo en Catamarca y en el GP Navidad en la Rioja, pero la cuestión con él gira en torno a su enorme espíritu de equipo, por lo que seguramente lo veremos sacrificándose desde el comienzo para el resto, aún teniendo opciones de algo más en las piernas.

Su contra es que sufre un resfriado. De todos modos, ya avisó que lo más inteligente es respaldar las dos cartas fuertes del San Luis Somos Todos (Godoy y Moyano), porque si no habrá “muchos capitanes y pocos gregarios”.

Conclusiones:

Obviamente que sólo puede ganar uno, pero la fortaleza del San Luis Somos Todos es su unidad y aventurar quién será el jefe de filas es una lotería, porque en realidad eso lo determinará la ruta, tal como aconteció hace un año cuando el campeón defensor, Dani Díaz, se despidió inesperadamente de sus chances en la llegada a Potrero.

Por antecedentes y actualidad, podemos conjeturar que Godoy y Moyano parten con algo de ventaja sobre los demás, pero una vez que el pelotón comience a rodar todos estarán en las mismas condiciones y deberán ganarse el status de líder.

Pese a ello, cualquiera sea el elegido, todos cuentan con el talento y los pergaminos para asaltar el podio de la ronda sanluiseña y los demás se vaciarán en su beneficio buscando recuperar el título que Nairo Quintana quitó a Díaz y, en consecuencia, a todos los puntanos.

Y lo mejor de todo es que, a falta de uno, el San Luis Somos Todos cuenta con cuatro jefes de fila, un auténtico póker de ases altamente capacitado para poner en jaque al pelotón y regalar espectáculo a los aficionados.

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