Thüringer Energie Team, cuna de talentos en peligro

Por @pmpalermo

A lo largo de la historia del deporte quedan registrados en la memoria colectiva personajes o instituciones reconocidos por destacar en diversas facetas importantes para el desarrollo de los atletas, y dentro de esas vertientes, podrían encuadrarse a los denominados educadores o a aquellos que son buenos en la detección de talentos y su posterior crecimiento.

El ciclismo no es la excepción y hoy se trata de resaltar el trabajo realizado en estos tópicos antes mencionados por el Thüringer Energie Team, estructura alemana con sede en Erfurt, conocida por gestar estrellas de la talla de Marcel Kittel, Patrick Gretsch, John Degenkolb, Tony Martin y ahora, Jasha Sütterlin.

Quizás sirva saber un dato referente a la región de Thüringer para comprender los motivos de tanto éxito deportivo, puesto que esta hermosa y boscosa provincia situada en el centro del país es, por caso, cuna de la mitad de los medallistas de los Juegos Olímpicos de Invierno, y vale la pena aclarar que Alemania es potencia mundial en dicho apartado.

Bajo la tutela de Jens Lang, recientemente contratado para el nuevo proyecto filial de Argos Shimano, estos pedalistas tuvieron la posibilidad de crecer en un ambiente controlado y con un enfoque integral en el que se los valoró como atletas y como personas.

No en vano se trata del conjunto más exitoso del país, ya que desde su creación en 2006 (cuando tomaron el relevo del Team Kostrizer) y hasta la fecha, los dirigidos por Jörg Werner lanzaron corredores de la más alta jerarquía al pelotón profesional, puesto que una de las premisas del pequeño combinado teutón es que sus pupilos den el salto realmente preparados.

Con el ex profesional en Telekom y Gerolsteiner, Stephan Schreck, como uno de sus directores y el creciente apoyo de la compañía energética de la región que les da el nombre, la escuadra expandió sus fronteras y además de realizar más competencias foráneas también incluyó por primera vez dos ciclistas no alemanes en su plantilla, los australianos Alex Frame y Jack Cummings.

Su última “creación”, el talentoso Jasha Sütterlin, ya fue contratado por el Movistar, que se quedó con el producto final tras tres temporadas de desarrollo en las que mostró su potencial como especialista contra el reloj e incluso con una buena punta de velocidad en llegadas con grupos reducidos.

Sütterlin es sólo un ejemplo del trabajo realizado en la factoría germana, en la que casi todos sus pedalistas poseen puntos en común que los destacan: una fuerte ideología anti dopaje, la habilidad de rodar contra el reloj pero también de sprintar y sobre todo el potencial para terminar su desarrollo en pos de sus mejores cualidades.

Tal es así que Kittel, por ejemplo, uno de los más destacados velocistas del momento y reciente líder del Tour de Francia, en su paso por el Thüringen era capaz de dar pelea sobre la cabra a los máximos exponentes de la categoría.

Degenkolb, otro embalador de renombre, cultivó sus dotes para las clásicas mientras crecía en la escuela-equipo, a punto tal que finalmente ganó la París Bourges, el año pasado se hizo con cinco etapas de la Vuelta a España y está igualmente preparado para brillar en el Tour de Flandes, dónde terminó 9º  la más reciente edición.

Es evidente que Werner, un mediocre ex corredor que debió dejarlo por una caída, sabe lo que hace y que no en vano está involucrado también en la organización de la Internationale Thüringen-Rundfahrt, con el apoyo claro está, del sponsor que solventa al equipo.

Y justamente por eso es que tiene a su favor el beneficio de la duda en el que podría ser un triste final, ya que según se supo en agosto, el manager tendría decidido marcharse y con él la estructura que respalda desde TeamSpirit Gmbh.

Si bien no está confirmado y no dio mayores precisiones del caso, dejó entrever que los dos últimos años sucedieron cosas lejos de su agrado que condujeron a este inesperado y abrupto desenlace en el que el ciclismo es el único perjudicado.

Sería una tragedia que desaparezca la formación que vio nacer a muchas de las estrellas actuales, pero si esto sucediera una cosa es segura: el Thüringer Energie Team será recordado durante mucho tiempo por su gran aporte al mundo de las dos ruedas y servirá de ejemplo para generaciones venideras con ansias de hacerlo bien desde la cantera.